La Reflexión Nº 147. Se
titula: El cristiano que no cree en la sanidad: ¿ Será salvo su espíritu el día que muera?
Amable lector: este es un
tema ríspido y muchos se preguntarán: ¿ Porqué hay líderes evangélicos que
habiendo dedicado su vida a predicar el evangelio están sujetos a múltiples
enfermedades o una sola, pero
terminal?.................................................
Estimado: ellos creen en la
salvación del alma, pero con sus hechos niegan el poder del Señor para sanar
todo tipo de enfermedad.
Creen que los milagros de
sanidades hechos por el Señor y sus discípulos fué solo en la época que el
Señor vino a este mundo. Niegan su poder para sanar y algunos hasta combaten a
aquellos a quienes el Señor les dio el don de sanidad.
En mi andar, una vez conocí a
un líder evangélico, abogado, versado en las sagradas escrituras, que había
predicado en E.E.U.U, según me había manifestado, quien tenía un templo
evangélico, en el que como todo líder aconsejaba y guiaba a su grey. En todo lo
referente al manejo del dinero se hacía
ordenadamente y con sabiduría, mas en lo referente a la sanidad no creía que el
Señor podía sanar a los enfermos y había algo más: estaba en contra del los
hombres ungidos por Dios para liberar de enfermedades. El tenía una enfermedad
terminal.
Estimado: la palabra de
Dios dice en “ Santiago 5:14-15
14 ¿ Está alguno enfermo
entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole
con aceite en el nombre del Señor.
15 Y la oración de fe salvará
al enfermo, y el Señor lo levantará, y si hubiere cometido pecados, le serán
perdonados.”
Amable lector: la misma
biblia que leía este pastor es la misma que tengo yo; el tema aquí es creer o
no a lo que está escrito en ella. La rebeldía a la palabra del Señor es algo
muy malo. Dice “ Salmos 25:3 Ciertamente ninguno de los que esperan en ti será
confundido; serán avergonzados los que se rebelan sin causa”.
Por desgracia este pastor,
que hice referencia más arriba siguió en su rebeldía y se murió. Esto pasó
realmente. Está escrito en: “ Jeremías 2:19 Tu maldad te castigará, y tus rebeldías
te condenarán, sabe , pues, y ve cuán malo y amargo es el haber dejado tú a
Jehová tu Dios, y faltar mi temor en ti, dice el Señor, Jehová de los
ejércitos”.
La mayoría de las personas
recurren a la medicina tradicional, mediante la que se obtienen resultados
positivos, mas muchas veces no. Y en ese punto límite, la persona tiene que
determinar, si ve que hay resultados negativos. ¿ Que hará? ¿ Seguirá como está
o buscará su sanidad en el Señor Jesucristo? ¿ Ir con fe al Señor o continuar
aferrado a lo que hasta ahora no le da resultado?
Nuestro Señor Jesucristo vino
al mundo, para perdonar nuestros pecados, y así poder heredar la vida eterna,
en su santa presencia, y para ello se sacrificó en la cruz del Calvario y
también vino a deshacer las obras del diablo que son robar, matar y destruir.
“ San Juan 10:10 El ladrón(
se refiere al diablo) no vino sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido
para que tengan vida , y para que la tengan en abundancia”.
“1 Juan 3:8 El que practica
el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto
vino el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo”.
Sabemos que el Señor Jesús
tiene todo el poder, simplemente debemos depositar nuestra fe en Él, nuestra
confianza, creer que Él nos sanará.
Manifestar fe a su sagrada
persona, pues sin fe no se puede agradar a Dios.
Dice:” Hebreos 11:6 Pero sin
fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que acerca a Dios
crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”.
Recomiendo leer el capítulo
completo. A continuación transcribiré versículos bíblicos, en que nuestro Señor
Jesucristo, sanó a una mujer que tenía flujo de sangre ( cáncer) y al tocar el
borde de su manto fue salvada de esa enfermedad maligna en forma instantánea. “
San Lucas 8: 43-48
43 Pero una mujer que padecía
de flujo de sangre desde hacía doce años, y que había gastado en médicos todo
cuanto tenía, y por ninguno había sido curada,
44 se le acercó por detrás y
tocó el borde se su manto; y al instante se detuvo el flujo de su sangre.
45 Entonces Jesús dijo: ¿
Quién es el que me ha tocado? Y negando todos; dijo Pedro a los que con él
estaban: Maestro, la multitud te aprieta y te oprime; y dices: ¿Quién es el que
me ha tocado?
46 Pero Jesús dijo: Alguien
me ha tocado; porque yo he conocido que ha salido poder de mí.
47 Entonces, cuando la mujer
vio que no había quedado oculta, vino temblando, y postrándose a sus pies, le
declaró delante de todo el pueblo por qué causa le había tocado, y como al
instante había sido sanada.
48 Y él le dijo: Hija, tu fe
te ha salvado; ve en paz”.
Estimado: observe que en el
versículo 48 el Señor le dijo a esta mujer tu fe te ha salvado, o sea que fue
salvada de ese gran azote porque fue al Señor con toda su fe.
Amable lector: ¿ Tiene usted
alguna enfermedad que no puede ser curada? De ser así entregue su vida al Señor
Jesucristo, deje que entre en su corazón y pídale que le sane; acepte el
sacrificio de la cruz del Calvario, comience a leer la Santa Biblia, (
recomiendo la Reina Valera edición 1960)vaya a un templo evangélico cristiano
en el que mueva el poder del Espíritu Santo de Dios y verá resultados
totalmente positivos. Para finalizar le dejo un versículo bíblico para
meditar:” Proverbios 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los
insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”.
Que el Señor lo bendiga
abundantemente: un amigo en el Señor. Si desea saber más llame al 1134012867,
de lu a vi en horario 8.00 a 18.00 hs.